Plutón, el planeta
que se asocia a los cambios y a las transformaciones, muchas veces a través del
dolor y del sufrimiento, fue descubierto el 18 de
Febrero de 1930, en aquel momento fue considerado el noveno y más
pequeño planeta del Sistema Solar por la Unión
Astronómica Internacional (UAI) y por la opinión pública hasta que el 24
de Agosto del 2006, tras un intenso debate la UAI decidió, por unanimidad,
reclasificar Plutón como planeta enano. Sin embargo su efecto y su poder
no han disminuido, su energía se siente intensamente en su recorrido por el
zodiaco.
Al principio se consideró que Plutón no poseía satélites (caso
similar a Mercurio y Venus). Sin embargo, en 1978 se descubrió su primer satélite
(Charon o Caronte). Desde entonces se han descubierto que existen cinco satélites conocidos de Plutón.
El satélite más grande es Caronte,
que de todas las lunas del sistema
solar, es la más grande en comparación con su planeta anfitrión, es decir,
ninguna otra luna es de un tamaño tan próximo al del planeta que orbita. El
tamaño tan parecido que tienen Plutón y Caronte hace que aparezca el efecto de planeta doble. Hidra, Nix, Cerbero y Estigia son los otros cuatro satélites de
Plutón, pero no son tan grandes como Caronte.
A continuación se presenta la
información concerniente a la mitología referente a estos personajes, ya que
donde se encuentre Plutón en una carta natal, allí se encuentran todos estos
personajes con su energía tan especial:
Plutón es el sobrenombre común
asociado al Dios Griego Hades, señor del inframundo. Representa el odio y la
venganza. Es el Dios de los muertos, hijo de Crono y Rea, hermano de Zeus y Poseidón,
es uno de los tres grandes que se repartieron el Universo después de la guerra
con los titanes. Como señor del inframundo, es un amo cruel y despiadado, que
no permite a ninguno de sus súbditos volver a la tierra, entre los vivos.
Charon o Caronte es el barquero de los
infiernos, hijo de Erebo y de Nix (la Noche), conducía por un danace, especie
de óbolo, las sombras de los muertos al otro lado de la Stigia y del Acheron.
Solo admitía en su barca las sombras de los que habían sido privados de los
honores de la sepultura, después de haberlas dejado vagar sin compasión ninguna
por cien años a la orilla del rio de los infiernos. Se representa este dios en
un anciano robusto que está de pie en medio de una barca, su continente triste,
barba blanca y atufada, ojos vivos y frente muy arrugada, sus vestidos son por
lo común oscuros y manchados del negro limo de los ríos que recorre, su barca
tiene velas de color de fuego y lleva un remo para guiarla. La fabula de Charon
y su barca es tomada de los egipcios que transportaban los difuntos a la otra
parte de un lago, en un sitio donde los hombres virtuosos eran después de su
muerte enterrados con toda distinción, y los malvados abandonados sin darles
sepultura.

El resto de su descendencia fue engendrada
por ella misma, que incluyen a: los Destinos (Moiras/Parcas y Moros/Fatum),
los Sueños (Hipno/Somnus, Morfeo y los Oneiros/Somnia), la Muerte (Tanatos/Mors y Ker/Letum),
la Disputa (Eris), las venganzas (Nemesis/Envidie y Erinias/Furias),
el odio (Estigia), las Herperides (diosas
del atardecer), y Caronte. Nix (la Noche) y sus hijos son considerados el
principio del mal.
Hidra
era un monstruo de siete cabezas que renacían a medida que se le cortaban, hija
de Equidna y Tifón, aunque algunos autores mencionan que fue hija de Nix. Vivía
en el lago Lerna y Hércules la mató segando todas las cabezas de un solo golpe.
Su sangre además era venenosa, y con ella impregnaría después sus flechas
Hércules, que la venció.
Aseguran que el veneno de Hidra fue muy
penetrante, ya que una flecha teñida con aquel veneno mató casi inmediatamente
a Quirón. Hidra fue un animal totalmente perjudicial y portador de muerte para
los hombres, ya que cuando atacaba devastaba todas las cosas del campo y
atentaba cruelmente contra los ganados y campos vecinos. Coloquialmente,
Ponerse hecho una Hidra, se emplea con el significado de enfurecerse o
enfadarse en grado sumo.
Cerbero
es el perro de tres cabezas y de tres bocas, que guardaba la puerta de los
infiernos y del palacio de Plutón, nació de Typhon y Echidna (maternidad
disputada con Nix según la bibliografía consultada). Cerbero era un monstruo
cruel en extremo, de un ladrido terrible, además de su talla y fuerza
extraordinarias. La entrada del triste palacio de Plutón estaba custodiada por
este formidable perro. Amaestrado en sus artificios, acaricia y acoge a los que
entran allí, mas impide la salida porque devora inhumanamente a los que
procuran huir de la sombría mansión. Atado en su gruta tenebrosa con ligaduras
de serpientes, sus dientes negros y cortantes penetran hasta la médula de los
huesos, causando agudísimos dolores que ocasionan la muerte en el instante.

Ahora bien, el punto donde está Plutón en la carta natal de un
individuo es conocido como el área de los cambios y las transformaciones que el
nativo viene a enfrentar en esta vida, ahora conociendo la energía que emanan
sus lunas, que nos hablan de lo oscuro, de la noche del alma, de lo brutal, de
lo venenoso y en dónde hemos sido crueles. Es posible que kármicamente hablando,
esta posición indique con quienes hemos sido crueles y perversos en el pasado,
donde está nuestro lado oscuro y posesivo, el odio y los celos, el veneno de
nuestra alma y la brutalidad con la que inconscientemente tratamos a los otros
o a la(s) persona(s) representadas por el signo y la casa en la que se
encuentra. Este es el verdadero trabajo, ya que requiere de un gran nivel de
consciencia para reconocer, superar y transcender aquello que nos causa dolor,
el cual traemos de muchas encarnaciones y está representado por ese punto en la
carta natal de un individuo.
Por ejemplo, una persona con Plutón a los 24° de Libra en la sexta
casa, también tendrá a Caronte, Nix, Hidra, Cerberos y Estigia a los
24° de Libra en casa seis, esto indica que tiende a ser cruel con sus compañeros de trabajo, con la pareja y/o socios y hasta con el entorno en general, por encontrarse en el signo de Libra. Hay odio y posesividad (incluyendo celos) para con
la pareja, el trabajo, la manera en que ofrece y hace un servicio, y con los compañeros
de trabajo. Pienso que también se refiere a un apego que viene a soltar en esta
vida, un dolor a purgar dejando de lado el odio y la venganza para lograr
transcender esa energía tan densa y poder superarlo, con la finalidad de
mantener una pareja y una relación cordial con sus compañeros de trabajo, y el entorno en general. A nivel de las enfermedades, por ser la casa seis, se puede
decir de enfermedades somatizadas por los propios pensamientos, venenosos y de
odio hacia sí mismo, y ni hablar de la regencia anatómica de Plutón, es decir, del aparato reproductor.
Ya con el conocimiento de esta información, se crea consciencia de
tener este emplazamiento y se genera un cambio debido a que se empieza a
analizar si es verdad que nos comportamos así con tantas personas alrededor, y es muy importante en dicho análisis ser muy sincero
consigo mismo, ya que el camino de la evolución es individual y depende de la
medida en que se reconozcan las fortalezas y las debilidades que todos como
seres terrenales tenemos. La cuestión ahora es
¿qué podemos hacer para manejar esta energía tan densa de la carta astral? La respuesta a eso es
personal y depende de lo que cada quien puede mejorar en su trato y en su vida,
sobre todo la recomendación es aceptarse y mejorar cada día en las medidas de
las posibilidades de cada persona, trabajar el autoperdón y conocerse a sí mismo.
Referencias Bibliográficas
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